El pasado fin de semana viví una de las más grandes experiencias de mi vida, Desde el viernes ya estaba conectada con el Universo experimentando sus maravillas en la naturaleza, gracias a una amiga y colega Master CRP, Nairth Brizón, tuve la oportunidad de conocer las instalaciones de la Hacienda La Concepción ubicada en Agüirre, Montalbán, Estado Carabobo. Definitivamente la conexión que tenemos con todo es cada vez más obvia e impresionante, resulta que en ese lugar hace aproximadamente 15 años no era visitado por mí, de hecho ya había olvidado dónde se encontraba, hasta que me entero que estamos en Agüirre. Inmediatamente recordé mis días allá, donde mi madrina. Así, disfruté de la belleza de ese mágico lugar, dormimos en una churuata hermosa, y fuimos arrulladas con los deliciosos sonidos de los bambúes que eran acariciados por la fuerte brisa de esa despejada y estrellada noche.
Al transcurrir las horas fuimos recibidas por un hermoso amanecer, fuimos a su encuentro y con pisadas en la cálida tierra de "La Concepción" fuimos recorriéndola para cargarnos de la energía del sol que felizmente se asomaba para regalarnos un hermoso y maravilloso sábado de formación.
Rumbo a Valencia la emoción siempre estuvo presente, era el presentimiento de que algo MARAVILLOSO estábamos por experimentar, y así fue, no hay duda de ello, lo vivido y descubierto en nuestra formación de Maestros CRP sólo puede ser sentido más no descrito, al menos no fácilmente.
Llegó el domingo, el día que CREÍ que culminaría mi formación como Maestro CRP y digo "creí" porque pensé que todo acababa con el curso, pero no fue así, el lunes fue el día de mayor aprendizaje para mi, aún estoy en formación hoy día, pues toda la teoría recibida entre sábado y domingo se han estado manifestando desde entonces,
Conocí gente maravillosa, a varios de ellos hoy los llamo "Mis Angelitos" y es que sin ningún interés me brindaron su apoyo, consideración, tiempo y esfuerzo por ayudarme en un momento de baja vibra, y yo estaba ahí recibiendo el apoyo y agradeciendo el mismo.
Desde el día Viernes en "La Concepción" recibí un sabio consejo: "Permite que te den", esa frase causó un estruendo dentro de mi, pues me he condenado a independizar mi ser por completo, al punto de sentirme mal al ver que otros quieran atenderme, darme. Pero entendí que si no permitía recibir JAMÁS recibiría lo que he pedido al Universo.
Desde ese viernes y para siempre ABRO MIS BRAZOS para Recibir y Agradecer Todo lo que Dios tenga para darme, TODO.
Y aunque no ha sido fácil romper las cadenas que yo misma me puse, decidí que nunca más me resistiría a recibir Los Milagros y Caricias Calientes.
Y recuerda, a tu vida,
#DaleColor
Que la Alegría esté contigo.
@DondellaDeColor
